Nuestro presidente.
Jesús Ramírez, mejor conocido en el mundo musical, entre sus amigos y familiares como mi chuy Ramírez.
Emigra a los Estados Unidos a la edad de 16 años acompañado por su querida madre, la señora Lucia González de Ramírez. Al llegar, inmediatamente es inscrito en el colegio para cursar el doceavo grado, donde asiste a regañadientes obligado por su mamá y hermanos.
El inquieto y emprendedor jovencito comienza a abrirse camino y a realizar pequeños trabajos y de ahí negocios. Donde va adquiriendo experiencia para volverse ya de adulto, un gran y exitoso empresario, dirigiendo con temple y profesionalismo varias empresas.
Desde muy pequeño, mi Chuy Ramírez desarrolla el gusto por la buena música. Recuerda con cariño a sus 5 tíos quienes fueran sus maestros y que frecuentemente se reunían para cantar bellas canciones que le llegaban al corazón y al alma.
Mi Chuy Ramírez quedo prendido de aquellos temas musicales donde la inspiración cantaba al romance, al amor, respeto, cariño, conquista, flores y un sin fin de halagos hacia la mujer y la vida.
Tanto en México como en Estados Unidos Jesús se dedica a cantar en los coros de varias iglesias. Después de muchos años de catarle a dios, decide incursionar en la música regional mexicana como solista y con mariachi.
Por 15 largos años no para de hacer giras, presentaciones, palenques, fiestas privadas y festivales. Recorre parte de la Unión Americana llevando su música a todos los rincones del corazón de sus seguidores, su familia triste comienza a sentir la ausencia de un padre, de un esposo.
El con valor toma la decisión más importante de su vida y con dolor en el alma decide retirase de una de sus grandes pasiones, la música, pero sin antes haber dejado huella en su pequeña hija Andrea Ramírez que a la corta edad de 2 añitos sigue los pasos de su talentoso padre.
La pequeña Andrea se integra en el mariachi juvenil de Azusa tocando varios instrumentos como el violín, la guitarra, el piano, el saxofón, la flauta, el ukulele y el clarinete, todos ellos leyendo las partituras, así como también cantando.
Feliz de que su hija haya seguido sus pasos, Jesús comienza a cuestionarse qué tipo de canciones va a cantar su hija.
Preocupado y consternado ya que el mismo sabe que la música de ahora es vacía, grotesca y vulgar, donde solo se habla de alcohol, drogas y sexo, donde solo se denigra al ser humano, donde parece que son muy pocos los autores con talento...es cuando Jesús toma la batuta y decide hacer algo por su hija y por todos los jóvenes que son el futuro de nuestro planeta. Con mucho ímpetu y ardua labor comienza a organizar el festival OTI USA. Enfocado en recuperar la música con valores y al mismo tiempo apoyar a compositores, arreglistas, cantantes, grupos musicales, bandas y autores de todas las edades.
Se rodea de un equipo de profesionales dentro del mundo del espectáculo y comienza la maravillosa aventura de darle vida a su proyecto.
Así es como nace...
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Organización de Talentos Independientes
